Se viene la segunda parte de la capacitación sobre Plataforma agrícola satelital de Chile (PLAS) que entrega valiosa información para el riego de los cultivos y análisis agronómicos.
El Dr. en Ciencias Agropecuarias y Master of Science Claudio Balbontín Nesvara realizará en la Región de Valparaíso la segunda parte de las jornadas de capacitación sobre la plataforma agrícola satelital de Chile-PLAS, sitio gratuito de consulta y descarga de información del estado de desarrollo de los cultivos (http://maps.spiderwebgis.org/login/?custom=plas).
En esta segunda parte se profundizará en la aplicación del uso de la plataforma en casos reales ya que la primera vez fue para conocer la plataforma y el potencial uso que ésta posee. Esta es cerrada ya que va dirigida a los mismos grupos que asistieron durante la primera jornada que se realizó en La Ligua a los extensionistas, coordinadores de riego y ejecutivos de Indap y luego en Quillota a académicos, agricultores y asesores.
Hasta ahora, la fecha programada para realizar estas capacitaciones son la segunda quincena de noviembre.
El proyecto INIA se titula “Plataforma agrícola satelital para el seguimiento de la determinación de los requerimientos hídricos de los principales cultivos del país” y es financiado por el FIA.
El equipo lo integra además de Claudio Balbontín las ingenieros agrónomos Magaly Odi y Jael Montecinos de INIA Intihuasi, Región de Coquimbo.
La Plataforma PLAS permite acceder de forma gratuita y estimar los coeficientes de cultivo de un campo, que son parámetros técnicos fundamentales para el riego. Las imágenes satelitales entregan información agronómica valiosa y de forma gratuita sobre las condiciones de los cultivos con satélite siendo un salto tecnológico extraordinario desde el punto de vista de la agricultura.
En la Plataforma PLAS se implementaron dos metodologías para estimar las necesidades hídricas de los cultivos utilizando información satelital: una a partir de la relación del coeficiente de cultivo Kcb con el índice NDVI para establecer la tasa de transpiración máxima del cultivo y otra a partir de un balance de energía superficial que permite establecer la tasa de transpiración actual del cultivo.
En opinión de Claudio Balbontín, “un aspecto muy valioso de este proyecto lo constituye la consolidación de un equipo multidisciplinario e interinstitucional de trabajo, que buscó poner las capacidades de investigación y desarrollo existentes en el país al servicio de los problemas que enfrenta la agricultura”.
“Es una herramienta muy potente de análisis, con un bajo costo, una adecuada frecuencia de registro y una gran capacidad de cobertura del territorio, ideal para el seguimiento de la dinámica de los cultivos en la región”, expresó el investigador. Conocer con mayor detalle cada sector características de los cultivos, el potencial que tienen y las necesidades de riego que necesitamos para cada uno de los territorios. Contar con una mejor gestión del recurso es fundamental generando análisis y modelos predictivos gracias a este sistema satelital”.
Fuente: INIA