Hace un par de años, 60 milímetros de lluvia sorprendieron a la provincia de Petorca y la comunidad tildó el hecho como “un milagro”. Es que la zona lleva casi 20 años viendo cómo los caudales de sus ríos son declarados “agotados” y cómo la escasez hídrica -declarada en 2012- interfiere con la calidad de vida de sus habitantes. Con esto, el último año, diversos medios europeos han advertido la situación de la provincia chilena, pero apuntan a un sólo responsable: La palta.
Fue así que el medio alemán Deutsche Welle vino hasta el país para realizar un reportaje audiovisual en el que diversos activistas medioambientales afirmaron que los productores de palta de la provincia de Petorca se “están robando el agua” para regar sus hectáreas. Mismas acusaciones que publicó la semana pasada el The Guardian, reconocido periódico británico, y que podrían traer -según el gremio- fuertes consecuencias al mercado y sus exportaciones.
“Son datos bastante irrefutables (…) La crítica que hacemos es fundamentalmente por el modelo de producción de alimentos en Chile que se asocia al uso intensivo e irracional de bienes naturales finitos y eso ha comprometido seria e irreversiblemente la vida de los más sencillos de Petorca”, agregó el vocero de Modatima, un movimiento de defensa de los recursos hídricos del país.
El activista Rodrigo Mundaca aseguró que un palto requiere un régimen de riego de 200 litros de agua por día y que para producir un kilo de paltas se necesitan 2.000 litros de agua en total. Cifras que, según The Guardian, estarían haciendo que la British Retail Consortium -que representa a los principales supermercados- le informe a sus asociados de las acusaciones para que evalúen si seguir comprando, o no, el producto chileno de dicha zona.
De hecho, Mundaca es claro: “En el ámbito internacional ya existe una opinión fundada y formada de que en Chile se producen paltas a expensas de la violación del derecho humano al agua. Dinamarca, Alemania y Gran Bretaña se empezaron a preocupar de que la producción se haga de manera sustentable (…) No puede naturalizarse la entrega de agua a la gente a través de camiones aljibe”.
El gremio paltero rompe el silencio
“Esto es mucho más que hablar de paltas”, sostuvo Francisco Contardo, gerente general del Comité de Palta Hass de Chile. “Estos movimientos están atentando contra la agricultura y la imagen de Chile. No están atentando sólo contra la palta, la palta es la fruta escogida, pero están atentando contra la institucionalidad del país”.
Además, Contardo apuntó directamente a los medios internacionales que han hecho eco del tema: “Nadie ha declarado que le va a cerrar las puertas a las paltas de Chile o a las de Petorca. De hecho eso que se comenta que Alemania y Escandinavia no van a comprar, es falso”.
Es más, el ingeniero comercial, denunció que fue “embaucado” por el medio alemán que lo entrevistó para el registro audiovisual que acusaba a los palteros de la sequía en Petorca. “Como Comité nos invitaron a participar de un reportaje para hablar de temas comerciales y finalmente fue una sorpresa que terminara siendo algo para atacar a los productores de palta”. También, afirmó que el campo en el que aparece hablando ni siquiera es de Petorca, sino que de la provincia del Aconcagua.
Sin embargo, reveló que efectivamente algunos de sus socios extranjeros se han acercado para consultar la veracidad de la información que se ha difundido y que, a modo de respuesta, los productores han entregado -nuevamente- los certificados internacionales que respaldan sus buenas prácticas empresariales.
“Todos los agricultores de palta que quieran exportar poseen dos certificaciones internacionales: Global Gap y Grasp. Ambos apelan hacia el buen trabajo empresarial, el buen trabajo con recursos humanos y una condicionante de sustentabilidad. Hoy en Petorca, además, existen de 3 a 5 empresas que tienen Rainforest Alliance que es una certificación más poderosa aún que apunta full a la sustentabilidad”.
La polémica de los datos y la gestión del agua
Según The Guardian, que cita a un estudio global de la organización Water Footprint Network, “se necesitan 2.000 litros de agua para producir un kilo de palta”. Sin embargo, Contardo aseguró que, en la zona de Petorca, se necesitan 389 litros.
Según un estudio de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa) que estuvo en manos del Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA). En él -con fecha de 2013- se sostiene que la huella hídrica referencial de las paltas de Petorca es de 386,3 litros por kilo.
Fuente: El Mercurio