Wang y Jim Gartung, quien es ingeniero agrícola, pusieron 12 sensores de temperatura infrarrojos en huertos de melocotones ubicados al Centro de Ciencias Agrícolas del Valle de San Joaquín en Parlier, y proveyeron a los árboles con uno de cuatro tratamientos: el riego por surcos o el riego subterráneo por goteo, y con o sin el estrés de agua después de la cosecha.
Los científicos usaron los sensores para medir las temperaturas de los doseles de los árboles, y calcularon un “índice de estrés hídrico del cultivo” basado en las diferencias entre las temperaturas en los doseles y la temperatura ambiente. Los números más altos en el índice indican más estrés en los árboles.
Los investigadores descubrieron que las diferencias en las temperaturas al mediodía en los árboles que sufrieron del estrés de agua fueron de 10 a 15 grados Fahrenheit, comparadas con una diferencia de 3 a 5 grados Fahrenheit en los árboles que no sufrieron del estrés de agua.
Fuente: mundoagro.cl